Estamos en un punto muy complicado de la sociedad porque hay tantas opciones que no sabemos qué hacer, las cosas antes eran más fáciles, todos sabían que rol debían cumplir, los hombres sabían qué cosas hacer y qué era esperado de ellos, las mujeres sabían que cosas no decir, cuál era su rol dentro de la familia. ¡Pero ahora! Hay demasiados hombres por la vida sin tener remota idea de cómo ser hombres así como muuuuchas mujeres que no tienen ni idea de cómo comportarse frente a esos hombres y viceversa!
Pero este artículo es para las mujeres, en otro momento escribiré sobre los hombres! Quiero que mires la imagen y veas como una parte va desapareciendo, la elegí porque gráficamente es lo que nos pasa cuando nos volvemos esposa, compañera, madre, hija, lo que espera la sociedad, lo que espera la familia, lo que esperan mis hijos… ¿Y lo que Yo soy cómo mujer? ¿Como individuo? ¿Como persona? Que aunque forme parte de un colectivo ¿Dónde quedan mis deseos como mujer?
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Y escuché algo super interesante en una sesión terapéutica y lo comparto! Nosotros desde que nacemos nos meten como un chip de que lo que somos naturalmente es MALO! Nos enseñaron desde lo más elemental como es ocultar el primero período, hasta que nadie nos dice qué carajo es un orgasmo razón por la cual vamos por la vida saltando de una relación insatisfactoria a otra. Nadie nos dice qué se espera de mí en una relación pero si se me llega a ocurrir tomar la sartén por el mango… Soy la mala, la tóxica, la cruel. A que más de una se siente identificada
A que todas las que me leen saben lo que significa sentirse culpable hasta por respirar… En alguna etapa de su vida… Ese punto donde mejor no digo nada porque el otro se puede ir, donde me aguanto un sinfín de cosas porque me da terror pensar en el desconocido mundo de estar sola. Y juro ante Dios, la virgen y los santos que lo amo y me ama . Hasta que llega un día… La vida toda linda ella y te lanza de frente esa otra cara de la moneda que no quisiste ver aunque tooodas las pruebas estaban ahí a pata’e mingo como dirían en mi tierra. Y de repente… Se murió el amor y el tipo o tipa se va. Y ayer me amabas, pero ya hoy no.
Entonces… ¿De qué sirvió todo ese tiempo donde no fuimos nosotras mismas? Donde antepusimos las necesidades del otro por encima de las nuestras. Donde sacrificamos partes de nosotras mismas para que el otro saliera adelante? Y así, sin pausa pero sin prisa nos fuimos desgastante hasta el punto de dejar de existir por nosotras, para nosotras sino que nos convertimos en proveedores de estabilidad para otros. En centros de rehabilitación para otros. En refugio para otros. En la pareja «perfecta» para el otro, pero… ¿Y el otro también hizo o hace todo eso por ti?
Debate abierto! Los leo…
Estoy un poco cansada de tantas consignas por la liberación femenina cuando la mayor liberación de la mujer es con cada una de nosotras, a puerta cerrada, yo con yo. Cuando yo cambio, el mundo cambia, no es al revés.
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Muchas gracias por tu valioso tiempo. Si deseas leer más artículos te invito a mi rincón para alimentar el alma.
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